KUNG FU SION
¿Qué sucede si mezclamos una película de artes marciales con
mucha comedia propia de dibujos animados y lo sazonamos con los chistes de Lepe? Pues que sale algo como lo
que nos ocupa hoy. Comedia absurda donde las haya, Kung Fusión de Stephen Chow, es una de las películas más celebradas y divertidas de su autor, llena por
igual de golpes cómicos que físicos.
Nos encontramos en la China de los años cuarenta, en una
ciudad gobernada por un grupo mafioso llamado Los Hachas, quienes gozan de
riqueza y respeto entre toda la población. El joven Sing sueña con formar parte
de la banda, pero sus intentos no sólo caen en el vacío, sino que se vuelven
contra él. Fingiendo formar parte de la banda, intenta explotar a los lugareños
que residen en un mísero edificio de las afueras y tanto él como su amigo se
llevarán la sorpresa de su vida al descubrir que en el edificio residen
peligrosos maestros kung fu, bajo la inocente apariencia de simples
trabajadores.
Los hachas, los residentes del edificio, los porteros, Sing
y un misterioso luchador desconocido se darán cita en esta película en la que el
viaje del héroe cobrará una nueva dimensión de hilaridad. Sing desea llegar a
ser un poderoso guerrero kung fu, ha sido su sueño desde niño, y desde niño se
ha dado de bruces contra la realidad: el mundo está lleno de personas mucho más
fuertes que él, con peor leche y amigos más poderosos. Anhelante de resarcirse
de cuantas humillaciones ha sufrido, no duda en arrimarse a los malvados,
convencido de que ellos pueden ayudarle a cumplir sus sueños, sin caer en un
detalle esencial: son malvados y no se caracterizan por interesarse en los
sueños ajenos.
El protagonista tendrá que aprender a luchar por sí mismo
hasta darse cuenta de que su fortaleza interior es muy superior a la que él
pensaba y que el primero en maltratarse era él mismo al no tener autoestima.
Sólo a través de esa comprensión desarrollará su potencial. También aprenderá a
no prejuzgar, puesto que la grandeza y la fortaleza puede parecer que están del
lado del que empuña un hacha, pero pueden esconderse dentro de una señora en
zapatillas y rulos.
Kung Fusión fue doblada con gran acierto al castellano al
hacer que cada personaje hablase con el acento de una región y usase modismos
propios de la misma, de modo que algunos personajes hablan con acento gallego o
catalán, hecho que servía para remarcar que en el original, también eran de
diferentes provincias de China, hablaban con sus respectivos acentos y causaban
la misma hilaridad. Junto a las peleas y los golpes estilo dibujo animado, fue
uno de los puntales de la comicidad del film.
Tras el éxito de Shaolin Soccer, Stephen Chow dirigió y protagonizó
la cinta que nos ocupa, que fue estrenada en 2004 en China y en 2005 en el mercado
occidental. La película se ganó rápidamente el corazón de los espectadores, recaudando
más de cien millones de dólares en todo el mundo, lo que la convirtió en la
película más taquillera de la historia de Hong-Kong, y la de mayor recaudación
de habla no inglesa en los EE. UU., además de ganar numerosos premios, como los
Hong-Kong Film Awards. Su éxito fue tal que se coqueteó con la idea de una secuela
allá por el 2012, aunque finalmente la idea no cuajó.
Kung Fusión es una cinta desenfadada y divertida, llena de
carcajadas, ideal para ver con amigos. No pretende hacer pensar, sólo que pases
un buen rato. Es como las cintas de Bud Spencer y Terence Hill -o de Jakie
Chan- pero elevada al cubo. Cinefiliabilidad 5, lo que significa que es fácil
de ver, muy entretenida y amigable, sólo se te hará difícil si su humor no conecta
contigo.
FICHA TÉCNICA.
KUNG FUSION
NACIONALIDAD: CHINA.
DIRECTOR: STEPHEN CHOW.
GÉNERO: COMEDIA
DURACIÓN: 94 MINUTOS
COLOR
DISPONIBLE EN MOVISTAR PLUS.
1 Comentarios
Stephen Chow es un comediante genial, aun me falta ver The God of Cookery, sigue la misma temática de acción y humor. Excelente review
ResponderEliminarSe respetuoso o se borrará tu comentario. Gracias.