Leiji Matsumoto, conocido principalmente por CapitĆ”n Harlock, Space Battleship Yamato y Galaxy Express 999 entre otras obras, siempre se caracterizĆ³ por la psicologĆ­a y los valores de sus protagonistas, con una tendencia hacia la crĆ­tica, la opresiĆ³n y la moral de las naciones en tiempos de guerra. Y quĆ© mejor obra para plasmar que lo ocurrido en la Segunda Guerra Mundial, tres Ovas adaptados de un manga escrito por Ć©l a principios de la dĆ©cada del 70. Pasen y lean, con ustedes The cockpit.

 Historia 1, Estela

Erhart Von Reindhas, piloto de combate del Eje, cae con la desgracia de ser considerado un cobarde. ¿Su acciĆ³n? Tirase en paracaĆ­das de su aviĆ³n Focke-Wulf 190 A4 cuando considerĆ³ que no podĆ­a salir ileso de sus perseguidores en pleno ataque aĆ©reo.

Tildado de no seguir las Ć³rdenes, con su escuadrĆ³n completo aniquilado y sin patriotismo, tendrĆ” una segunda oportunidad para reivindicarse, con la misiĆ³n de escoltar a un bombardero que lleva algo secreto y muy peligroso como cargamento.

Sin embargo, una novia del pasado junto a su padre cientĆ­fico, advierten que llegar al destino serĆ­a el peor de los escenarios. Con la Ć©tica y el deber hacia JapĆ³n, el protagonista deberĆ” elegir nuevamente si seguir las instrucciones o aceptar lo que le manda la consciencia...

 




Historia 2, Cherry Blossom

Nogami, un piloto kamikaze, tiene la misiĆ³n suicida de pilotear a "La Flor de Cerezo", considerada como aviĆ³n/ataĆŗd pues la muerte es segura para quien lo maneje. Inicialmente el bombardero no llega al portaaviones estadounidense en el OcĆ©ano PacĆ­fico, pero lo intentarĆ”n con otro escuadrĆ³n al dĆ­a siguiente, ya que la cercanĆ­a del objetivo es primordial para el Ć©xito. Pasando la noche con sus compaƱeros de flota Nogami ve que la guerra estĆ” casi perdida, mientras platican e intercambian historias personales se manifiesta que sus convicciones no merman, llegando las horas decisivas para su Ćŗltima tarea... 


 Historia 3, el DragĆ³n de hierro

Con un bombardeo masivo en la regiĆ³n, Kodai y Utsunomiya, dos soldados nipones, quedan a cargo de volver a su base, uno por una promesa realizada, el otro para ayudarlo a cumplirla. Pero temen que sea en vano ya que la posibilidad de que estĆ© ocupada por los enemigos es muy alta.

En un sidecar restaurado, ambos irƔn conociƩndose y mientras corren, el desenlace de su carrera se acerca...

Como toda labor del mangaka, la perfecciĆ³n de las mĆ”quinas es lo que resalta en cada entrega, los aviones son fieles a la realidad y cada artefacto posee el peso de lo que era en su momento, velocidad, altura, armas. Cada escena de acciĆ³n es confeccionada para no ser pesada y si bien son escasos, los minutos de combate valen lo plasmado en la animaciĆ³n.

Se visualiza la competencia por mejores aeroplanos y tambiĆ©n la impotencia japonesa por algo que juzgan acabado, en algunos casos el honor es lo mĆ”s sagrado, en otros una palabra vacĆ­a. La valentĆ­a se muestra de formas variadas, aunque lo importante siempre serĆ” el pasado y el futuro de los personajes. Dependiendo el destino vemos cĆ³mo se las arreglan para seguir sus convicciones, estĆ©n erradas o acertadas no frenan pese al peligro.

 


La segunda historia personalmente es la que mĆ”s me impacta, porque retrata con fidelidad el Cerezo en flor, miniaviĆ³n destinado con sus cohetes de alta velocidad a traspasar cualquier obstĆ”culo enemigo ya que el cohete-humano logra superar la barrera del sonido, siendo inalcanzable para los tiradores.

A pesar del intento de romantizar del relato, con su dibujo y algunos sujetos dibujados en forma caricaturesca, no deja de ser trĆ”gico ver que existieron en la vida real, un verdadero lavado de cerebro para los pilotos. Prototipos de bombarderos, cazas Ta 152, Ohka, aeronaves A6M2 y el sidecar Kawasaki Ki-61, que hace su apariciĆ³n en la Ova final, todos con trazos fidedignos.

A pesar de todo el guion antibĆ©lico, no deja de ser interesante el hecho de mostrar a los Aliados como mĆ”s sanguinarios, la bomba atĆ³mica es un tema que se menciona continuamente al igual que la inutilidad de la guerra. Matsumoto es un referente a la libertad dentro del manga y cada anime que tiene su sello, pero aquĆ­ vemos un rasgo de querer no "demonizar" a todos los soldados japoneses, que sĆ³lo son hombres mandados y no tienen la culpa de las Ć³rdenes de las altas esferas polĆ­ticas.

Para finalizar, la mĆŗsica tiene poca presencia para dar mĆ”s Ć©nfasis a los abundantes diĆ”logos, hallĆ”ndolas principalmente cuando las armas hablan o en situaciones estresantes. Los trazos de los humanos son los habituales del autor, algunos con cicatrices "a lo Harlock", marca registrada del mangaka.

En resumen: Obra para ver de un tirĆ³n, se pasa rĆ”pido. Recomendable, aunque no quedarĆ” como otros clĆ”sicos de Leiji Matsumoto, nos vemos en otro nĆŗmero.



Ficha tƩcnica


TĆ­tulo en espaƱol: La cabina del piloto/The cockpit

TĆ­tulo original: ć‚¶・ć‚³ć‚Æ惔惃惈

Adaptado manga: Leiji Matsumoto

DuraciĆ³n: 67 minutos

AƱo: 1993