Probablemente no sorprenda a nadie si digo que soy una gran aficionada a los relatos de Lovecraft y a su terror cósmico. Así que tampoco creo que sorprenda a nadie que este cómic con guión de Alan Moore y con un Cthulhu durmiente en la portada, cortesía de Jarren Burrows, me haya llamado la atención.

                Neonomicón, o en particular esta edición que corre a cargo de Panini, recoge ese cómic y su precuela, llamada The Courtyard, publicada en 2003 por Avatar Press y en 2004 por Aleta Ediciones en nuestro país.

                En The Courtyard se nos presenta a Aldo Sax, un agente del FBI que investiga unos extraños casos de asesinatos que le acaban llevando al club Zothique en una de las zonas más peligrosas de Brooklyn. Conocerá a un peculiar hombre llamado Johnny Carcosa y allí le indicara que vaya a un sombrío patio de la zona de Red Hook, en donde Sax comenzará a entender que se encuentra frente algo más grande que una sectas satánica.

                Neonomicón recoge el testigo de esta historia y le da una continuación de mano de los mismos autores. En este caso, los protagonistas serán los también agentes del FBI Lamper y Brears, que investigan los dos asesinatos perpetrados por Aldo Sax, encerrado ahora en un hospital psiquiátrico. A partir de ahí, se sumergirán en una trama que les llevará hasta un culto que cambiará para siempre la vida de ambos agentes.



                Mientras que The Courtyard es una historia interesante, redonda y llena de influencias lovecraftianas, de la cual sabemos que Moore es un gran seguidor (ver, por ejemplo, una de sus obras más recientes, Providence, publicada en España también por Panini), Neonomicón  no es un cómic tan brillante. Alejado de lo intrincado de la trama de la primera historia, la segunda casi lo usa como escenario para meternos de forma gratuita sexo y violencia de forma gratuita, que puede molestar en mayor o menor medida al lector. Aunque si bien es cierto que se simplifica bastante la mitología lovecraftiana, la reflexión final del tomo invita al menos a replantearse los hechos narrados en los cuentos de Lovecraft y a darles otra perspectiva. No en vano, y por muy trabajo-para-pagar-facturas que sea Neonomicón, sigue tratándose de Alan Moore y deja su impronta.

                Como siempre, antes de empezar a escribir una reseña, suelo tener por costumbre leerme otras. Principalmente, para ver otros enfoques de vista o para inspirar por dónde quiero llevar mi crítica y enriquecerla. En este caso, he leído varias críticas acerca del dibujo de Burrows, sobre que si no es bueno o sobre que si no es expresivo. Aquí creo que la cuestión es que no podemos jugar a un «What if?» de qué hubiera sido si la hubiera dibujado otro artista, por lo que voy a hablar en exclusiva de lo que me ha parecido el arte del autor para esta obra. Si bien es cierto que se nota el dibujo un tanto encorsetado, el arte de Burrows para mí es correcto para la historia que Moore quería explicar y por lo tanto, funciona.

                No os voy a mentir y deciros que Neonomicón es una obra de arte. No es ni de lejos la mejor obra de Alan Moore, ni mucho menos de las inspiradas en el universo Lovecraftiano que tiene en su haber. Es entretenida, sin más, aunque mucho mejor que otros cómics que podéis encontrar en el mercado, pero no llega a la altura de otras a las cuales nos tiene acostumbrados. Necesaria si eres fan del guionista, aunque si aún no has leído nada de él, es preferible que empieces por sus aclamados V de Vendetta, Watchmen o From Hell, y si lo que quieres es leer algo en cómic sobre Lovecraft que sea de este guionista, mejor tira por Providence, una historia bastante más redonda y trabajada que ésta.



Ficha técnica

Título Original: Neonomicon
Autores: Alan Moore (guión) Jarren Burrows (dibujo)
Editorial original: Avatar Press
Editorial española: Panini 
ISBN 9788498857238
Precio: 18 €