Si a Guy Delisle le hubieran explicado muchos aƱos atrĆ”s, que su experiencia como director de animaciĆ³n en la capital de Corea del Norte, se iba a convertir en uno de los cĆ³mics mĆ”s importantes de la historia del noveno arte, probablemente no lo hubiera creĆdo.
Pyongyang, publicado con mucho Ć©xito por parte de Astiberri, nos narra precisamente eso, su estancia en uno de los lugares mĆ”s restringidos a extranjeros del mundo. Delisle fue contratado como director de animaciĆ³n para una pelĆcula, cuyas escenas menos delicadas de animar se realizaron en un estudio de Corea del Norte, precisamente en su capital, Pyongyang.
A partir de esa premisa, el autor nos irĆ” contando desde el humor, en ocasiones Ć”cido, sus aventuras en aquel paĆs, que van desde el inevitable impacto cultural que le supone viajar a un paĆs oriental a un occidental, hasta lo sorprendente que le resultan ciertas actitudes mĆ”s relacionadas con el rĆ©gimen polĆtico del paĆs. El autor nos explicarĆ” cĆ³mo la propaganda polĆtica es permanente en aquel paĆs o cĆ³mo recelan de todo lo extranjero como, por ejemplo, representa en la escena dedicada al aeropuerto. En ella se nos presenta pasando los controles en la aduana, con un primer plano a lo que se podĆa llevar y lo que no a aquel paĆs. Sin embargo, aquĆ estĆ” el genio del Delisle cuando consigue pasar un ejemplar de la novela 1984 de Orwell, que posteriormente regala a un norcoreano.
Otra de las escenas mĆ”s curiosas narra que, cierto dĆa, le llevan de excursiĆ³n a un museo bastante alejado de la capital, para el cual han construido expresamente una autopista para poder llegar. DespuĆ©s de la visita y el ensalzamiento al rĆ©gimen, tiene lugar una escena bastante bucĆ³lica, en donde el autor reflexiona cuando ve por primera vez a sus acompaƱantes como personas individuales. Sin embargo, hasta aquel lugar en medio de la nada, ha llegado tambiĆ©n la propaganda polĆtica. Delisle se preguntarĆ” en muchas ocasiones quĆ© es lo que verdaderamente piensan los habitantes de aquel paĆs ante todo lo que Ć©l estĆ” viendo: la falta de medios, la falta de alimentaciĆ³n, la falta de electricidad, la propaganda constante, los trabajos «voluntarios»… En ese caso, son los silencios, que elocuentemente plasma en el cĆ³mic, lo que mĆ”s habla de ello.
Delisle es tambiĆ©n autor de otras historias en las que acompaƱa a su mujer, que es mĆ©dico sin fronteras, y a sus hijos, a lugares tambiĆ©n conflictivos que refleja en CrĆ³nicas birmanas o CrĆ³nicas de JerusalĆ©n, tambiĆ©n publicadas en EspaƱa por Astiberri. PodrĆamos decir que con su estilo de dibujo minimalista y su capacidad de sĆntesis en las viƱetas inaugurarĆa de forma magistral un nuevo estilo de cĆ³mic, uno que va a caballo entre la crĆ³nica periodĆstica y el libro de viajes.
Pyongyang es un imprescindible dentro de tu comiteca, que merece estar al lado de obras tan importantes como Maus o PersĆ©polis. Una historia cruda, explicada en primera persona y sin tapujos sobre uno de los paĆses mĆ”s cerrados y desconocidos del planeta. Su lectura no os dejarĆ” indiferentes.
Ficha TĆ©cnica
TĆtulo Original: Pyongyang
Autor: Guy Delisle
Editorial original: L'Association 2003
Editorial espaƱola: Astiberri
ISBN 978-84-96815-05-6
Precio: 18€
0 Comentarios
Se respetuoso o se borrarĆ” tu comentario. Gracias.