Original publicado en KZ #27 abril 2012

Por Ysora y Calistina


Ana Miralles LĆ³pez, es una madrileƱa que se iniciĆ³ en el mundo del cĆ³mic de la mano de la revista Rambla en 1982; despuĆ©s vendrĆ­an Madriz y Cairo, hasta dar el salto internacional con Eva Medusa contando con el guiĆ³n de Antonio Segura.
En busca del Unicornio, Djinn y recientemente, WƔluk, son algunas de sus obras.
Se le reconociĆ³ el mĆ©rito a su gran carrera, premiĆ”ndola en el SalĆ³n del cĆ³mic de Barcelona en el 2009. Sepamos algo mĆ”s de ella.

KZ- ¿QuĆ© queda de la Ana Miralles que iniciĆ³ su particular sueƱo allĆ” en los aƱos ’80? ¿QuĆ© ha cambiado?

Queda bastante de aquel primer impulso, porque sigo soƱando con las mismas cosas y me sigue haciendo ilusiĆ³n cada nuevo proyecto. Todo ello adobado con la experiencia que he acumulado a lo largo de los aƱos, y que me ha enriquecido a todos los niveles.



KZ-Tienes un estilo personal y maduro en tu trabajo como dibujante de cĆ³mics, ¿cuĆ”les han sido tus principales influencias a lo largo del tiempo?

Buscar un estilo propio es uno de los principales quebraderos de cabeza de los principiantes. En los primeros trabajos sientes inseguridad porque te estĆ”s comparando con los maestros a los que admiras, y si eres un poco autocrĆ­tica y perfeccionista ves horrorizada todo lo que te queda por recorrer hasta llegar a hacer algo que des por bueno. AsĆ­, cada publicaciĆ³n se convertĆ­a en un doloroso examen, un espejo en el que ver todos los fallos de tu obra. Cuando empezaba a dibujar yo querĆ­a ser Fontanarrosa, querĆ­a ser Moebius, querĆ­a ser Gallardo, Tardi, Will Eisner, Harold Foster, Hugo Pratt... Son autores a los que sigo admirando, y en el camino se han unido otros muchos, pero para ser creativa y original he buscado mi propio camino, procurando enriquecer mi universo grĆ”fico con otras disciplinas como la pintura, por ejemplo.



KZ-CĆ³mo dibujante ¿cuĆ”l ha sido tu reto mĆ”s importante para llevarlo a buen tĆ©rmino?

Todo lo que he hecho ha tenido sus dificultades. Hay que tener en cuenta que aparte de tus miedos, fobias y problemas con el pincel o plumilla, estƔn las siempre cambiantes relaciones con los editores, con los que nunca te aburres.

Con Eva Medusa me enfrentaba a mi primera historia larga, despuĆ©s de 10 aƱos intermitentes de hacer historias cortas en diferentes revistas. Con en Busca del Unicornio mi principal preocupaciĆ³n era no traicionar a la obra que nos habĆ­a inspirado, la novela de Juan Eslava GalĆ”n y profundizar en el realismo y la documentaciĆ³n veraz. Con Djinn, mi serie mĆ”s extensa, he creado un universo grĆ”fico basado en las fantasĆ­as orientalistas de occidente, y he intentado darle coherencia y alma.

El one shot "De mano en mano" fue complicado de hacer porque tenĆ­amos poco tiempo y mucha presiĆ³n, el resultado no fue el esperado aunque trabajĆ© muchĆ­simo, con ilusiĆ³n... Con WĆ”luk el reto era averiguar cuĆ”ntos tipos de blanco podĆ­a plasmar, y si podrĆ­a hacer adorable al carnĆ­voro mĆ”s eficaz del planeta transformado en peluche.
Definitivamente, el reto en el que ahora estamos metidos, Muraqqa', es el mƔs difƭcil por la complejidad del mundo que describimos, por lo ambicioso del proyecto y por las circunstancias que atravesamos. Hay mucha incertidumbre...

KZ-De todas tus obras, ¿de cuĆ”l te sientes mĆ”s orgullosa?

Es difĆ­cil elegir, porque a todas las quieres y tambiĆ©n a todas les pongo algĆŗn " pero"...Creo que siempre puedo mejorar, y en eso andamos. Pero si hay que decir un tĆ­tulo, En Busca del Unicornio fue una verdadera superaciĆ³n y una carrera de obstĆ”culos con recompensa final. Me marcĆ³ el camino para todo lo que vino despuĆ©s.
Peroooo....tambiĆ©n me siento muy orgullosa de haber hecho ya 10 Ć”lbumes de Djinn, de haber creado unos personajes sĆ³lidos con todo su universo.

KZ- ¿AlgĆŗn personaje que te haya costado plasmar y por quĆ©? ¿De cual te sientes mĆ”s satisfecha?

Me costĆ³ mucho hacer al rey Gorila, no acababa de verlo. Hasta le propuse a Jean hacer mejor un cocodrilo gigante, pero Ć©l querĆ­a pelos... Al final quedĆ© satisfecha con el retrato que le hice. Un tipo grave, serio, un pelĆ­n retorcido...lĆ”stima que dure tan poco.

El personaje que mƔs juego me ha dado ha sido Juan de Olid, porque le vemos madurar a lo largo de la historia, y tiene toda una paleta de expresiones, de estados de Ɣnimo que son una gozada para un dibujante. Al menos yo me lo paso muy bien retratando la psicologƭa de los personajes.

KZ-En dos obras como Djinn y Muraqqa, lo oriental tiene mucha importancia, especialmente lo sensual y lo erĆ³tico de los harenes. ¿En quĆ© te has inspirado para poder plasmar esa sensaciĆ³n en tus dibujos?

Muraqqa' nace del deseo de profundizar en el fascinante mundo de los harenes. Para mi trabajo en Djinn me documentĆ© exhaustivamente y siempre utilizas una mĆ­nima parte de lo recogido. AsĆ­ descubrĆ­ la india del s XVII y sus fabulosos palacios y harenes. Con Djinn el tema del orientalismo se acabĆ³ practicamente en el cuarto Ć”lbum, aparte de que el tema que sobrevuela toda la serie es principalmente el poder en todas sus manifestaciones.
Mi inspiraciĆ³n en ambos casos ha sido la pintura. Para Djinn la del s XIX, con magnĆ­ficos pintores de imaginaciĆ³n desbordada ( ninguno estuvo dentro de un harĆ©n, claro ) como Jean-LĆ©on GĆ©rĆ“me, Paul-Louis Bouchard, Ferdinand Roybet, Benjamin Constant...la lista es enorme.
En Muraqqa' he encontrado toda la informaciĆ³n necesaria para documentarme en sus miniaturas, preciosas obras de arte.

KZ-Has trabajado con Antonio Segura, Jean Dufaux y Emilio Ruiz (repitiendo con Ć©ste Ćŗltimo) ¿con cuĆ”l has trabajado mejor? ¿Alguna anĆ©cdota?

AnĆ©cdotas, muchas. Lo primero, un emotivo recuerdo a Antonio Segura, recientemente desaparecido, demasiado pronto. Ɖl me abriĆ³ las puertas de la publicaciĆ³n en Francia, y con Ć©l hice mi primera serie. Nos llevĆ”bamos muy bien, aunque los dos tenĆ­amos un carĆ”cter fuerte, pero en lo esencial coincidĆ­amos. Ɖl tuvo que soportar mi inexperiencia, mis neuras de no querer dibujar ciertas cosas a las que le tenĆ­a una manĆ­a horrible, como las armas, los automĆ³viles y los barcos. Por eso para el segundo Ć”lbum de Eva Medusa hicimos Emilio y yo una maqueta del Menino JesĆŗs, el barco donde transcurre la historia. Antonio tenĆ­a un mĆ©todo infalible para que no le pusiera pegas a un nuevo guiĆ³n : me invitaba a cenar a su casa ( la relaciĆ³n con Ana, su esposa, y sus hijas era entraƱable y familiar, hasta la gata de la casa era un cielo ), allĆ­ mismo me tenĆ­a que leer el guiĆ³n, y claro, como aquello era una fiesta, siempre me parecĆ­a fantĆ”stico.

Con Emilio Ruiz he trabajado siempre, ya que me gustan sus historias. Tenemos una misma forma de ver las cosas y nuestro interĆ©s va en la misma direcciĆ³n. Tal vez tenga que ver el que seamos pareja, nos conocemos mucho y tenemos mĆ”s tiempo y ocasiĆ³n de perfilar las historias. AdemĆ”s sus historias las hago mĆ­as porque participo activamente en ellas en mayor o menor medida.

Dufaux es un guionista clĆ”sico, una star, alguien que trabaja siempre igual con sus dibujantes. No formas equipo, te asocias con labores bien diferenciadas. El guiĆ³n aparece hecho y cerrado un dĆ­a, y yo lo dibujo a mi aire. Hay respeto por ambas partes pero poca comunicaciĆ³n, aunque despuĆ©s de 10 Ć”lbumes ya estĆ” todo claro.

KZ- Tu Ćŗltima obra, WĆ”luk, estĆ” dirigida al pĆŗblico infantil. Un buen cambio de registro. ¿QuĆ© es mĆ”s difĆ­cil, ilustrar al pĆŗblico adulto o imaginar el fantĆ”stco mundo de los niƱos?

Son tan diferentes que no se puede comparar la dificultad.
Todo es muy difĆ­cil si quieres hacer algo original, si quieres ser creativa. Y poco importa a quien vaya dirigido.
Hay que ser honesta e intentar dar lo mejor de ti misma.
WƔluk la hice para mƭ... y luego nos dimos cuenta de que a los niƱos les gustaba.
AdemĆ”s el mundo infantil y juvenil no me es ajeno, he ilustrado una treintena de libros y cuando empecĆ© en el cĆ³mic, de verdad creĆ­a que me dedicarĆ­a a hacer historias juveniles de humor...

KZ-A pesar de ser una de las ilustradoras espaƱolas de la actualidad en el mundo del cĆ³mic patrio, siempre acabas volviendo tu vista hacia Francia. Todos conocemos las dificultades de publicaciĆ³n en EspaƱa pero, ¿crees que tanto el mercado como las editoriales han evolucionado a lo largo de toda tu carrera?¿Nos queda aĆŗn mucho camino para recorrer hasta alcanzar el mercado franco-belga?

SĆ­. Y lo digo con pesar. Es muy complejo, porque no se trata de editoriales, que las hay y muy buenas, de distribuidores, donde tenemos tambiĆ©n un gran nivel, y la red de librerĆ­as especializadas que cuenta con gente realmente vocacional...Todo eso estĆ” bien pero es poco en cantidad, que no en calidad. Tenemos un mercado raquĆ­tico para los lectores potenciales que hay en este paĆ­s. Falta mercado, pĆŗblico, lectores, dinero para consumir cultura, educaciĆ³n para disfrutarla, respeto desde los estamentos y que se considere al cĆ³mic como una fuente de riqueza mĆ”s, al igual que el cine o la literatura. Se nos considera el pariente tonto de la cultura. Por ejemplo, la presentaciĆ³n que se hace de un cĆ³mic en los programas de televisiĆ³n suele ser deficitaria, porque son incapaces de mostrar una historieta tal cual es, quieta y muda. Siempre animan las viƱetas con algĆŗn efecto, le aƱaden sonidos... ni se conoce ni se respeta el medio de expresiĆ³n del cĆ³mic, Ćŗnico y maravilloso.
Los autores que hemos desarrollado nuestra carrera en Francia y BĆ©lgica hemos conseguido una continuidad en la publicaciĆ³n que aquĆ­ es imposible. Y podemos vivir de nuestro trabajo.

KZ- Por Ćŗltimo, algĆŗn consejo para quienes quieran seguir tu estela o iniciarse en el mundillo del cĆ³mic…

Cada carrera es Ćŗnica y es el resultado de lo que querĆ­as hacer y lo que al final pudiste hacer...
La Ćŗnica fĆ³rmula infalible que conozco para dedicarte a esto es meterle horas, trabajo, ilusiĆ³n y perseverancia.
Trabajando aprendes a conocerte y si no te engaƱas, pronto sabrƔs si sirves para esto. Si tienes esa certeza, estarƔs preparado para pasar aƱos duros. Pero hay que resistir, dicen que quien aguanta, gana. Es un trabajo solitario y sacrificado porque no hay horarios y no siempre los amigos y la familia lo entiende.
Hay que tener proyectos, prepararlos y moverlos por las editoriales, alguna dirĆ” que sĆ­...